El primer programa dedicado a la prevención y al tratamiento de lesiones en ejecutantes de instrumentos musicales y cantantes festeja su aniversario con una conferencia y los preparativos para exportar este emprendimiento mediante una plataforma web
Músicos de Alto Rendimiento, el programa de terapia ocupacional dedicado a la prevención y al tratamiento de lesiones en los artistas sonoros, arriba este mes de septiembre a doce años de trayectoria con la alegría de haber sido seleccionados por Semillas Naranja, para hacer crecer este emprendimiento venezolano creado por la terapeuta Fátima Fernández.
Para celebrar este nuevo aniversario, Fernández ofrecerá la conferencia titulada el Bienestar de los músicos, que resumirá los pasos para que los instrumentistas lleven una vida más saludable. La cita con entrada gratuita es el jueves 13 de septiembre, de 9:00 am a 12:00 del mediodía, en la Mega Sala Digital de Telefónica Movistar, en Parque Cristal, Caracas.
La actividad contará con la participación por videoconferencia de una invitada especial, la profesora Ana Pérez, quien lleva el programa Postura sana en el Conservatorio de Gijón, en España.
Músicos de Alto Rendimiento es uno de los cuatro ganadores del programa Semillas Naranja, que tiene como propósito apalancar emprendimientos relacionados con la industria musical. La creadora de esta iniciativa, Fátima Fernández, se hizo acreedora de una serie de asesorías y de un incentivo económico para la aceleración de su emprendimiento, con el respaldo de Arepa Music, Ecoem y de la Embajada de Estados Unidos en Venezuela.
Fernández celebró haber obtenido este reconocimiento proveniente de representantes de la industria musical que le abre las puertas para que cada vez más personas conozcan las actividades y los servicios de Músicos de Alto Rendimiento.
UNA HISTORIA DE ÉXITO
Al principio, Fátima Fernández no pensó en participar en Semillas Naranja porque la salud no era un área contemplada en la convocatoria que hizo el programa, pero una amiga la exhortó a atender el llamado y fue cuando se decidió. Explicó que era un proyecto de salud y de prevención de lesiones en los músicos. Su propuesta fue atractiva y resultó seleccionada junto a otras 29.
Después de pasar una jornada de formación en diferentes temas, la terapeuta presentó su programa durante tan solo cinco minutos ante un jurado de coaches y especialistas del mundo de la música.
“Fui lo más honesta y transparente sobre mi proyecto, que es una novedad y sigue siendo pionero, el único hasta ahora relacionado con la salud en los músicos”, contó.
El discurso de cinco minutos convirtió a Fátima Fernández en una de las cuatro ganadoras de esta primera edición de Semillas Naranja. La meta de la emprendedora es llevar su programa a más músicos, promover su trabajo en una plataforma en línea para exportar el programa Músicos de Alto Rendimiento: “Voy por la internacionalización”, aseguró.
Fernández también aspira que su programa crezca más en Venezuela, que “cada músico venezolano pueda beneficiarse”. “El premio de Semillas Naranja es una plataforma para seguir creciendo y a futuro, tener un espacio propio, para hacer talleres y conferencias con más frecuencia. Que las sesiones con los músicos sean menos tabú, puedan acceder al programa sin necesidad de tener una lesión y que pueden resultar beneficiados porque fue ideado especialmente para ellos”, deseó la emprendedora.
Fernández ejemplificó la importancia del cuidado de la salud de los músicos con la rutina de un futbolista como “Cristiano Ronaldo, que no sale a la cancha a correr durante 90 minutos sin haber calentado, sin que su terapeuta le haya hecho masajes, estiramientos, relajación. Un músico puede salir a tocar una ópera que dura más tiempo, dura tres horas”.
HACE DOCE AÑOS
La historia de Músicos de Alto Rendimiento comenzó en 2006, cuando Fátima Fernández acababa de graduarse de terapeuta y su hermano, el cuatrista Ángel Fernández, se lesionó el túnel carpiano en cada mano. Lo atendió y comenzó a investigar sobre la lesiones de los músicos y en cómo hacer para prevenirlas.
“En ese momento me di cuenta de que en Venezuela no existían terapeutas especializados en esta área. Además de percatarme de la fuerte rutina de los músicos, por las posturas, el desgaste físico, la cantidad de movimientos repetitivos para tocar un instrumento. Comprendí que en la investigación estaba la fuerza de mis ideas, que luego se convirtieron en proyecto, y luego en una necesidad, cuando atendí a los amigos de mi hermano -que todos son músicos- y después los amigos de los amigos, se convirtieron en un gran mar de músicos”, recordó la terapeuta.
Este mes de septiembre se cumplirán 12 años del primer taller que Fátima Fernández ofreció como parte de su programa de prevención de lesiones en los músicos. Para la terapeuta “todos estos años han sido de muchísimo trabajo, de corazón, de constancia. El gremio de la música necesitaba alguien que se dedicara especialmente a su salud y creo que siguen necesitándolo”.
Además de conferencias, talleres y sesiones personalizadas incluso detrás del escenario para prevenir o ayudar a los músicos con sus lesiones, a tener un mejor provecho de su cuerpo en cuanto a la ejecución instrumental, Fernández también apoya a cantantes que requieren mejorar su rendimiento.
Para la terapeuta “han sido muchas las satisfacciones durante estos 12 años. Una es que mi hermano, hoy día, puede tocar su cuatro sin lesiones y eso me hace muy feliz, también mi libro y la publicación de mi ebook que está disponible en Venezuela Sinfónica. Ahora le sumo este reconocimiento de Semillas Naranja”.
Músicos de Alto Rendimiento no discrimina en lo géneros y ha atendido a figuras como Aquiles Báez, Pedro Eustache, Christian Vásquez, Carmen Borregales, Jorge Torres, Miguel Delgado Estévez, Ángel y César Fernández, Alfredo Gutiérrez y Milagros Figuera. La creadora del programa estima que a la fecha ha atendido a más de 500 artistas.
Músicos de Alto Rendimiento está en Instagram y Twitter en la cuenta @musicosmar y en Facebook: MusicosMar.
Coordenadas
Conferencia: Bienestar de los músicos
Jueves 13 de septiembre, de 9am a 12m, Entrada Libre
Mega Sala Digital de Telefónica Movistar, en Parque Cristal, Caraca
El Fascinante Origen del Día de las Bromas de Abril El Día de las Bromas de Abril, conocido también como “April Fools’ Day”, tiene raíces históricas sorprendentes. A mediados del siglo XVI, el Año Nuevo se celebraba entre el 25 de marzo y el 1 de abril. Todo cambió cuando un decreto del rey de Francia, conocido como el Edicto de Roussillon, trasladó esta festividad al 1 de enero. Sin embargo, la noticia no llegó a todos de inmediato. Muchas regiones francesas y colonias protestantes en América, por desconocimiento o resistencia, siguieron festejando en abril, lo que les ganó el apodo de “tontos”. Con el tiempo, esta confusión dio paso a una tradición única. Los norteamericanos, ingeniosos y burlones, transformaron el 1 de abril en el Día de las Bromas, una fecha para sorprender con travesuras y regalos divertidos. Lo que comenzó como un error histórico se convirtió en una celebración global, donde la creatividad y el humor son protagonistas. A pesar de su origen europeo, el Día de las Bromas trasciende fronteras. Hoy, empresas, medios y personas aprovechan esta fecha para conectar con audiencias mediante bromas ingeniosas, fortaleciendo lazos sociales y culturales. Es un recordatorio de cómo un malentendido puede evolucionar en algo positivo y entretenido. Fuentes adicionales: “The History of April Fools’ Day” (History.com) “April Fools’ Day: Origins and Traditions” (National Geographic) https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es
Con más de 13.000 años extinto, el lobo gigante renace en laboratorio como el primer caso exitoso de desextinción, gracias a la edición genética avanzada de Colossal Biosciences. Colossal Biosciences ha alcanzado un hito sin precedentes al presentar tres cachorros que combinan el ADN del lobo gris moderno con variantes genéticas del lobo gigante, especie desaparecida hace más de 13 000 años. Tras recuperar ADN fósil en 2021, el equipo identificó 20 genes clave asociados a mayor tamaño, densidad de pelaje y robustez ósea. Utilizando CRISPR, editaron células de lobo gris para crear embriones implantados en madres sustitutas caninas, dando lugar a Rómulo, Remo y Khaleesi, dos machos de seis meses y una hembra de dos meses, respectivamente. La directora científica de Colossal, Beth Shapiro, calificó a estas crías como “el primer caso de éxito de desextinción. Estamos creando copias funcionales de algo que solía estar vivo”, declaró en una reciente entrevista. Aunque los ejemplares permanecerán en cautiverio, este avance tecnológico podría aplicarse para proteger especies aún vivas, como el lobo rojo, en peligro crítico y limitado a Carolina del Norte. Este proyecto no solo desafía los límites de la biología sintética, sino que también plantea preguntas éticas sobre el bienestar animal y la conservación. Mientras algunos expertos abogan por protocolos rigurosos y marcos regulatorios que garanticen la responsabilidad ecológica, otros ven en la desextinción una herramienta para restaurar dinámicas de ecosistemas perdidos. De prosperar, la reintroducción de estos lobos podría revitalizar hábitats y equilibrar poblaciones de presas. Sin embargo, su éxito dependerá de evaluaciones de comportamiento en semilibertad y de la capacidad de estos animales para adaptarse a entornos naturales. Fuentes consultadas: Colossal Biosciences (2025). Press Release: First Giant Wolf Cubs. https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es