Ante el ascenso de contagios
***En el Grupo Médico Santa Paula (GMSP), se han extremado las medidas de bioseguridad en los espacios para la consulta, hospitalización y cirugía de pacientes con coronavirus; también se cuenta con un área de obstetricia especial para parturientas portadoras del virus
Ante el significativo aumento diario de casos de coronavirus y la naturaleza altamente contagiosa de este patógeno, los especialistas advierten de la necesidad de contar con áreas de atención aisladas y distintas en los centros de salud, para recibir -de forma separada- tanto a pacientes que tengan esta infección viral, como aquellos que no, brindando los servicios médicos requeridos, sin que exista riesgo al contagio.
El director médico adjunto del GMPS, Dr. Rafael González, explica que, desde febrero de este año, en esta institución se ha establecido una zona de triaje exclusiva para la consulta y el diagnóstico de pacientes con COVID-19, al igual que para la hospitalización de personas que ya presentan los síntomas propios de la segunda y tercera etapa de la enfermedad.
Hospitalización
En la etapa 2 de la infección, los pacientes presentan síntomas como: baja saturación de oxígeno en la sangre, y el virus ha afectado los tejidos pulmonares, por lo que requieren ser trasladados a hospitalización, en otra área exclusiva del GMSP, apartada de quienes se recuperan de una cirugía, por ejemplo.
“Allí, le brindamos el tratamiento con oxigenoterapia, corticosteroides y anticoagulantes, con un manejo seguro en el piso 4 de la clínica; espacio que posee una zona especial para estos casos, sin comprometer la salud del resto de los pacientes y del personal que trabaja en la institución”, indica González.
Lo mismo sucede con las parturientas con COVID-19 o sospecha de ser portadoras del virus, quienes son atendidas en el área de obstetricia y neonatología, aparte de las otras mujeres sanas.
En la etapa 3 del virus, cuando los pulmones y otros órganos se inflaman y se presentan infecciones como la neumonía, los pacientes requieren ingresar a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), que para los enfermos con coronavirus se ubicó en otro piso diferente de donde están hospitalizados quienes han sufrido, por ejemplo, un accidente cerebrovascular (ACV), traumatismo craneoencefálico u otra enfermedad.
“En definitiva, contamos con tres áreas autónomas: la de diagnóstico, la de hospitalización y la UCI para COVID-19. En cada espacio,el personal está debidamente entrenado y protegido para los estudios y el manejo de los portadores del coronavirus. Hay un equipo sanitario solo para atención de casos de coronavirus y otro para las pacientes no COVID-19”, afirma
En el caso de cirugías, hay un quirófano con ventilación y aire independiente. El director médico adjunto explica que, en las intervenciones quirúrgicas se producen aerosoles que pueden esparcir el virus, aunque es un riesgo muy bajo. Para eliminar cualquier posibilidad, se ha habilitado un área quirúrgica con una salida independiente de esas sustancias, por lo que ese aire aerolizado no entra a otras zonas de la clínica.
Traslados e ingresos a consultas médicas.
Cuando hay ingreso de emergencia de pacientes con la infección viral, se activa un operativo que incluye al personal de seguridad en coordinación con médicos y enfermeras, para trasladarlo por una ruta segura; luego, el personal de limpieza procede a la desinfección de todas las áreas.
Como medidas complementarias, en las salas de esperase ha retirado asientos para mantener la distancia debida entre pacientes; no se permite el ingreso de personas sin mascarilla y tampoco el acceso de acompañantes ni en el área de consulta ni hospitalización, a menos que sea un niño o un adulto de avanzada edad.
Las medidas también abarcan las guardias del personal asistencial, de la limpieza y desinfección de las instalaciones, el control de acceso a pacientes y las medidas de bioseguridad (uso de guantes, caretas y otros implementos), tanto para los médicos como para las personas que van a consulta.
“Es como tener dos clínicas dentro de una, nuestra zona de triaje está ubicada a 100 metros de la emergencia convencional para evitar cualquier riesgo de contagio. El personal que allí labora, está destinado exclusivamente a esa área y no tiene contacto con otros pacientes. Tanto médicos como enfermeras cuentan con batas, guantes, mascarillas y todo el equipamiento especial que requieren. En esa área se realizan todos los estudios, exámenes de laboratorio e imagenología, que es rayos X de tórax para el diagnóstico”, señala González.
El Fascinante Origen del Día de las Bromas de Abril El Día de las Bromas de Abril, conocido también como “April Fools’ Day”, tiene raíces históricas sorprendentes. A mediados del siglo XVI, el Año Nuevo se celebraba entre el 25 de marzo y el 1 de abril. Todo cambió cuando un decreto del rey de Francia, conocido como el Edicto de Roussillon, trasladó esta festividad al 1 de enero. Sin embargo, la noticia no llegó a todos de inmediato. Muchas regiones francesas y colonias protestantes en América, por desconocimiento o resistencia, siguieron festejando en abril, lo que les ganó el apodo de “tontos”. Con el tiempo, esta confusión dio paso a una tradición única. Los norteamericanos, ingeniosos y burlones, transformaron el 1 de abril en el Día de las Bromas, una fecha para sorprender con travesuras y regalos divertidos. Lo que comenzó como un error histórico se convirtió en una celebración global, donde la creatividad y el humor son protagonistas. A pesar de su origen europeo, el Día de las Bromas trasciende fronteras. Hoy, empresas, medios y personas aprovechan esta fecha para conectar con audiencias mediante bromas ingeniosas, fortaleciendo lazos sociales y culturales. Es un recordatorio de cómo un malentendido puede evolucionar en algo positivo y entretenido. Fuentes adicionales: “The History of April Fools’ Day” (History.com) “April Fools’ Day: Origins and Traditions” (National Geographic) https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es
Con más de 13.000 años extinto, el lobo gigante renace en laboratorio como el primer caso exitoso de desextinción, gracias a la edición genética avanzada de Colossal Biosciences. Colossal Biosciences ha alcanzado un hito sin precedentes al presentar tres cachorros que combinan el ADN del lobo gris moderno con variantes genéticas del lobo gigante, especie desaparecida hace más de 13 000 años. Tras recuperar ADN fósil en 2021, el equipo identificó 20 genes clave asociados a mayor tamaño, densidad de pelaje y robustez ósea. Utilizando CRISPR, editaron células de lobo gris para crear embriones implantados en madres sustitutas caninas, dando lugar a Rómulo, Remo y Khaleesi, dos machos de seis meses y una hembra de dos meses, respectivamente. La directora científica de Colossal, Beth Shapiro, calificó a estas crías como “el primer caso de éxito de desextinción. Estamos creando copias funcionales de algo que solía estar vivo”, declaró en una reciente entrevista. Aunque los ejemplares permanecerán en cautiverio, este avance tecnológico podría aplicarse para proteger especies aún vivas, como el lobo rojo, en peligro crítico y limitado a Carolina del Norte. Este proyecto no solo desafía los límites de la biología sintética, sino que también plantea preguntas éticas sobre el bienestar animal y la conservación. Mientras algunos expertos abogan por protocolos rigurosos y marcos regulatorios que garanticen la responsabilidad ecológica, otros ven en la desextinción una herramienta para restaurar dinámicas de ecosistemas perdidos. De prosperar, la reintroducción de estos lobos podría revitalizar hábitats y equilibrar poblaciones de presas. Sin embargo, su éxito dependerá de evaluaciones de comportamiento en semilibertad y de la capacidad de estos animales para adaptarse a entornos naturales. Fuentes consultadas: Colossal Biosciences (2025). Press Release: First Giant Wolf Cubs. https://www.tiktok.com/@mscnoticias?lang=es